El conservadurismo se manifiesta de muchas formas, la más aberrante es la que cobra forma en la política: panismo, priismo, emecismo, trumpismo, mileilismo, guácala; o en la moral, machismo, racismo, homofobia.

Lo cierto es que todos tenemos un lado conservador. El mío se revela cuando desaparece algún lugar que me dio identidad, me trajo buenos momentos y que ingenuamente uno cree que siempre estaría ahí.

Lamento mucho la desaparición de la Beer Factory, en especial la de Cuicuilco. Ojalá que toda esa gente que hoy labora su último día en los bares de quien fuera dueño de los Gigante, encuentren un buen trabajo.

Por casualidad asistí a comer hoy al sitio y me enteré de que hoy cierra la marca. Adiós Beer Factory 🥲.

Y no, no, es broma de los santos inocentes, esto que comento sucedió el 29.