En las rejas del Senado de la República, sobre Paseo de la Reforma e Insurgentes, ven a disfrutar la exposición de 58 fotografías de gran formato que muestran parte de la historia de la artista duranguense, que brilló en Hollywood y en México, Dolores del Río.
En el marco del 120 aniversario del natalicio de la actriz Dolores del Río, la Secretaría de Cultura del Gobierno de México, a través del Instituto Nacional de Estudios Históricos de las Revoluciones de México (INEHRM), y el Senado de la República inauguraron la exposición fotográfica “Dolores del Río: una actriz, una estrella y una compañera solidaria”, en la galería abierta del recinto legislativo,
La directora del Museo Nacional de las Intervenciones (MNI), Cecilia Genel Velasco, resaltó que quienes recorran la exposición disfrutarán de una selección exquisita de fotografías, las cuales se encuentran también en el libro digital Dolores del Río: una actriz, una estrella y una compañera solidaria –mismo nombre de la exposición–. Está disponible para consulta y descarga gratuita en https://www.inehrm.gob.mx/recursos/Libros/2024_unaactriz_unaestrella_dolores_del_rio.pdf
Mujer duranguese de impacto internacional
María Dolores Asúnsolo López Negrete (1904-1983), su nombre verdadero, nació en Durango, fue hija única del matrimonio de don Jesús Leonardo Asúnsolo y doña Antonia López Negrete y López. Su padre provenía de una estirpe de productores ganaderos y comerciantes. El conflicto armado de la Revolución mexicana forzó el traslado de la familia a la Ciudad de México, por lo que de niña recibió educación en el convento de Saint-Joseph, dirigido principalmente por monjas francesas.
Educada como una aristócrata mexicana, aprendió normas de cortesía y comportamiento, dominio del idioma francés, a vestir de etiqueta y practicar las virtudes cristianas. En su adolescencia recibió clases de danza española con la distinguida Felipa López.
A los 17 años, Dolores se casó con Jaime Martínez del Río, hombre de negocios, 18 años mayor. Viajaron a Europa en una Luna de miel de dos años; en ese tiempo conocieron al director Edwin Carewe, quien los llevó a la capital del cine mundial con la promesa de convertir a la joven en una estrella de Hollywood.
En Estados Unidos, estudió actuación e inglés y rápidamente obtuvo su primer papel en Joanna (1925) y realizó otros proyectos pequeños que le permitieron llamar la atención de varios directores. En 1926 triunfó en Hollywood con el filme What Price Glory?, con el que obtuvo el premio “WAMPAS Baby Stars” (de la Western Association of Motion Picture Advertisers).
Convertida en la primera actriz latina y mexicana del siglo XX en ser una estrella de cine en Hollywood durante la década de 1930, Dolores regresó a su país natal, donde se consolidó como ícono del cine nacional; con sus participaciones en cintas como María Candelaria (1943), Bugambilia (1945), Flor Silvestre (1943) y Doña Perfecta (1951) se hizo merecedora cuatro veces del Premio Ariel. Impulsó la creación del Festival Internacional Cervantino y destacó por ser la primera mujer en formar parte del Jurado del Festival de Cannes, Francia.
Desde la década de 1950 participó activamente en la Asociación Nacional de Actores (ANDA). Su labor resaltó la importancia de tener un respaldo gremial y jurídico frente al poder de las grandes empresas cinematográficas.
Fuente: Secretaría de Cultura Federal
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